Hace poco tiempo hablando de Ryan McGinley y les hicimos referencia a  Wolfgang Tillmans (1968), fotógrafo y artista conceptual alemán que  trabaja en Londres y Berlíi. Referente mundial del arte actual, su obra  emplea la investigación sobre los conceptos básicos de la fotografía y  la realización de instalaciones. Comenzó su  trabajo de investigador reproduciendo imágenes tomadas de periódicos y  algunas de sus fotografías, con fotocopias láser en blanco y negro sobre  imágenes fotográficas. Durante estos años, en los que también se dedicó  a la fotografía de moda, estuvo publicando sus fotografías en las  revistas i-D, Tempo, Spex y Prinz. 
En 1990 comenzó a estudiar  fotografía, dos años después se trasladó a Londres y posteriormente a  Nueva York. La muerte de su compañero en 1997 a causa del sida hizo que  le dedicara una serie de fotografías como su «última comida o la ventana  del hospital». En sus exposiciones suele colocar las imágenes sin  destacar las obtenidas mediante una cámara fotográfica de aquellas  procedentes de cualquier otro medio de reproducción, como una  fotocopiadora. En 2002 grabó un documental titulado “Ligth” para Pet  Shop Boys. Tillmans también está considerado uno de esos artistas que  confieren a su obra un punto “pseudodocumentalista” muy en la línea de  artistas norteamericanos de los 80. Como tantos otros,  también  fotografió fiestas, clubes, conciertos, amigos y la fama le llevó a ser  requerido por gente como Kate Moss,  Damon Albarn y  Moby. Pero la  diferencia que encontramos en Tillmans, respecto a sus referentes o  sucesores, es que se trata de un arista más complejo y dificil de  clasificar, ya que no se a quedó sólo en lo que les hemos comentado, que  le funcionaba profesionalmente. La inquietud le ha llevado a pasar por  diferentes facetas llevándole en muchos casos de la realidad a lo  abstracto y no es fácil encontrar una línea conductora en su obra. A  eso, nosotros, le llamamos carácter.












 
 
 
