Hace tiempo preparo una guerra breve
sobre el acantilado de tu piel moruna,
arriba, bajo la floresta, en mayo.
Abundante hervirá la sangre,
espabilado reptil,
porque tú serás contrincante,
chef de sacras manos.
Y si una vestal se alongara a la contienda
la arrojaremos al vacío.
Sería la primera víctima.
Luego, te esconderás de mí.
Yo de ti.
Salvaremos obstáculos,
descubriremos la sabana inmensa,
calmaremos la sed en los lagos.
Pero nunca te detengas
porque te mataré
si tú no lo haces antes conmigo.
Te aseguro, será una brevísima guerra.
El eco dará vuelta al mundo.
Texto por: ANTONIO JIMÉNEZ PAZ del libro Los Ciclos de la Piel.